La odontopediatría no se trata solo de curar caries; se trata de evitarlas. Cada padre sabe lo difícil que es conseguir que los niños se cepillen los dientes posteriores a conciencia, especialmente en las zonas de difícil acceso. Estas muelas, con sus surcos y fisuras profundas, son trampas perfectas para las bacterias y los restos de comida, convirtiéndose en el lugar de inicio de la inmensa mayoría de las caries en la infancia. En Clínica Dental El Maitén, nuestra filosofía de odontopediatría se basa en la prevención activa. El pilar fundamental de esta defensa son los selladores dentales, a menudo combinados con la aplicación de flúor, que actúan como un escudo protector invisible que puede reducir significativamente el riesgo de caries en los niños. Este tratamiento simple y no invasivo es una de las mejores inversiones que puede hacer en la salud dental futura de su hijo.
¿Por qué los selladores son necesarios?
La anatomía del molar es el problema. Nuestras muelas permanentes (molares y premolares) tienen en su superficie de masticación una serie de fisuras y surcos naturales que son microscópicamente profundos y estrechos.
- Profundidad difícil de alcanzar: Las cerdas del cepillo dental, aunque sean de buena calidad, a menudo son demasiado gruesas para penetrar hasta el fondo de estas fisuras. Esto significa que las bacterias quedan atrapadas allí, incluso después de un cepillado riguroso.
- Ambiente ácido: Una vez que las bacterias se acumulan, producen ácido que comienza a desmineralizar el esmalte, iniciando la carie de fisura.
Los selladores dentales resuelven este problema de raíz: son una barrera física que llena y sella esos surcos difíciles, negándoles el acceso a las bacterias y a los restos de comida.
Selladores Dentales: El Procedimiento Simple y Rápido
Una de las mejores noticias es que el proceso de colocación de selladores es completamente invasivo, rápido y sin dolor. Esta experiencia positiva es fundamental en odontopediatría, y ayuda a prevenir el miedo al dentista en el futuro.
Paso a Paso en La Clínica:
- Limpieza Profunda: El diente se limpia a fondo para eliminar cualquier resto de placa o bacteria de las fisuras.
- Preparación de la Superficie: Se aplica un ácido suave para preparar el esmalte, creando una superficie ligeramente áspera que permite una adhesión fuerte del sellador.
- Aplicación del Sellador: El sellador, una resina fluida de color blanco o transparente, se coloca directamente en las fisuras y surcos.
- Fijación con Luz: El material se endurece en segundos mediante una luz especial (similar a la utilizada para los empastes de resina).
- Ajuste Final: El dentista verifica que el sellador no interfiera con la mordida del niño.
El proceso es tan sencillo que no requiere anestesia y dura solo unos minutos por diente.
¿A qué edad se deben aplicar los selladores dentales?
El momento ideal es cuando las muelas están recién erupcionando, antes de que las bacterias tengan la oportunidad de colonizar las fisuras.
- Primeros Molares Permanentes: Erupcionan alrededor de los 6 años. Estas son las primeras muelas fijas y deben ser selladas lo antes posible.
- Segundos Molares Permanentes: Erupcionan alrededor de los 12 años. Deben ser sellados igualmente para protegerlos desde el inicio.
Los selladores son una medida de prevención excelente para adolescentes y algunos adultos con fisuras muy profundas, pero su máximo beneficio se obtiene en el momento de la erupción dental.
El Complemento Perfecto: El Papel del Flúor
Si los selladores son el escudo físico, la aplicación profesional de flúor es el refuerzo químico del esmalte. En Clínica Dental El Maitén, combinamos ambos procedimientos para ofrecer una defensa integral.
La aplicación de flúor profesional se hace en altas concentraciones y tiene tres funciones clave:
- Remineralización: Ayuda a curar las caries en sus etapas más tempranas (manchas blancas) revirtiendo la desmineralización.
- Esmalte Fuerte: El flúor hace que el esmalte sea más resistente al ataque de ácidos producidos por las bacterias.
- Sensibilidad: Al sellar los poros del esmalte, es eficaz para reducir la sensibilidad dental.
La combinación de selladores en fisuras y flúor en toda la superficie dental ofrece la mejor protección que un niño puede recibir.
Los Beneficios a Largo Plazo de Esta Prevención Invisible
La colocación de selladores dentales no es solo un tratamiento para el presente; es una inversión en la salud a largo plazo de su hijo.
- Evitando Caries: Reduce el riesgo de caries en las muelas permanentes en hasta un 80% durante los primeros dos años y un 50% durante los siguientes.
- Ahorro Económico: El costo de un sellador es mínimo en comparación con el costo y la molestia de un empaste, una endodoncia o una extracción posterior.
- Salud Psicólogica: Las experiencias positivas en la clínica ayudan a establecer una relación de confianza con el dentista, previendo la odontofobia en ediciones futuras.
- Longevidad del Diente: Al prevenir la carie inicial, se protege la integridad de la muela permanente, asegurando que puedan durar toda la vida.
Consideraciones importantes y cuidados de selladores dentales
Los selladores dentales son muy duraderos, pero no infalibles. Su calidad depende de una técnica de adhesión profesional y de cuidados posteriores:
- Verificación Regular: En cada revisión semestral, el odontopediatra verificará la integridad del sellador. Si existe una pérdida o un deterioro parcial, es fácil reaplicarlo o repararlo.
- Evitar Comportamientos de Riesgo: Aunque son resistentes, se debe evitar que el niño muerda objetos extraños (carámelos duros, hielo, plástico) que puedan desprender el material.
- Cepillado Continuo: Los selladores protegen las fisuras, pero el resto del diente sigue expuesto. Es vital mantener el hábito del cepillado y el uso de hilo dental.
En Clínica Dental El Maitén, nuestra misión es que su hijo nunca tenga que preocuparse por la caries. Los selladores dentales y el flúor son nuestra primera y mejor línea de defensa. Consulte con nuestro odontopediatra sobre este sencillo procedimiento en la próxima revisión de su hijo.
